Archivo de la categoría ‘Geología en la vida cotidiana’

Otro lugar para visitar: los volcanes africanos

Hoy vuelvo sobre un tema que vengo desarrollando desde hace varios años: los sitios que vale la pena conocer en el mundo, y esta vez paseamos imaginariamente por África, donde usamos algunos de sus muchos volcanes como excusa para profundizar sobre otro tema; el rift africano.

¿Dónde queda el rift de África y cuál es su expresión visible?

Qué es un rift ya lo he explicado muy sintéticamente en otro post, de modo que parto suponiendo que ya sabes las generalidades, y hoy veremos un caso particular, para lo cual elijo una porción emblemática en el territorio africano. Pero vayamos de a poco, comenzando por definir el megasistema antes de llegar a la porción etíope que veremos con más detalle.

Ya sabemos, pues que un rift es un contacto divergente entre placas adyacentes.

En este caso la placa africana está separándose en las que a uno y otro lado del rift serían la placa Somalí y la placa Nubia. Como su velocidad promedio de desplazamiento es de 6 a 7 mm anuales, de no producirse cambios significativos, en el plazo de unos 10 millones de años, el que se conoce como «cuerno de África» se habría separado del continente surgiendo entre ambos una nueva cuenca oceánica.

La mejor expresión visible de este megaproceso, es la presencia de numerosos volcanes- activos o no- medianamente alineados a lo largo del espacio en que el adelgazamiento progresivo de la corteza facilita el ascenso de magmas, hasta su aparición en superficie a través de esos centros eruptivos, ya sea en el presente o el pasado geológico.

Algunos de esos volcanes delatores son:

  • Los tres volcanes inactivos (Shira, Mawenzi y Kibo) que conforman el monte Kilimanjaro, en el noreste de Tanzania, que es el pico más alto de África, ya que alcanza los 5.895m aproximadamente.
  • El Erta Ale en Etiopía, que es en realidad un complejo volcánico que incluye al menos 6 volcanes relacionados entre sí.
  • El Kenya en el país homónimo.
  • El Karisimbi y el Nyragongo, ambos en las montañas Virunga en la porción del Rift Albertino, entre la República Democrática del Congo y Rwanda.
  • El Meru y el Ol Doinyo Lengal activo) en Tanzania.
  • El Elgon en Uganda.

Podría mencionar muchos más, pero éstos son ilustrativos del fenómeno que tiene lugar en el este africano.

¿Cómo está conformado todo el sistema del rift?

Todo el sistema es bastante extenso y complejo ya que incluye subsistemas correspondientes a segmentos aproximadamente alineados de norte a sur, que en su conjunto comprenden miles de kilómetros.

​Hay al menos dos ramas principales:

El Valle del Rift Oriental que incluye el Gran Rift Etíope, con un recorrido entre la Triple Unión de Afar, al noreste y el Valle del Ríft Keniata al sur.

En su trazado, el Rift Oriental afecta porciones de Etiopía, Kenia, Uganda, Rwanda, Burundi, Zambia, Tanzania, Malawi y Mozambique. En la porción sur, alejándose de la costa, atraviesa la cuenca occidental somalí, definiendo la frontera entre Tanzania y Mozambique.​

La otra rama es el Valle del Rift Occidental que incluye el rift Albertino, y las montañas Virunga y más al sur, el valle del Lago Malawi.

¿Qué se define como MER y cuál es su importancia?

MER es la sigla del sector más estudiado y probablemente más significativo de todo el rift, es decir el Main Ethiopian Rift (Rift Etíope Principal), que une la depresión de Afar en el Mar Rojo, con la depresión Turkana y el Rift de Kenya al sur.

Allí han quedado registros geológicos testimoniando las diversas etapas desde la iniciación del rift hasta la ruptura continental incipiente.

¿Cómo es la evolución geológica de esta megaestructura?

El rift mismo reconoce una historia que no va más allá del Terciario, pero antes de ese proceso, la litología etíope está compuesta por un basamento precámbrico extremadamente plegado y foliado, sobre el cual yacen sedimentos marinos mesozoicos subhorizontales.

Como ya adelanté más arriba, el proceso de rifting habría comenzado en el Terciario con la efusión de grandes volúmenes basálticos, hace unos 30 millones de años. Al mismo tiempo o muy poco después habría ocurrido un levantamiento que generó las mesetas de Etiopía y Somalia que rodean al rift.

La fase principal habría tenido lugar en el Mio-Plioceno, a lo largo de sucesivos pulsos, y no de manera continuada, ocurriendo a lo largo de antiguas debilidades corticales existentes ya en el Precámbrico.

Si bien hay sobre el punto todavía mucha incertidumbre, existe un relativo acuerdo en considerar que el MER habría evolucionado en dos fases diferentes.

En la primera habrían dominado el desplazamiento a lo largo de grandes fallas, la subsidencia que generó cuencas asimétricas de hasta 5 km de profundidad, y una actividad magmática muy difusa.

En la segunda, probablemente durante el Pleistoceno, la actividad se circunscribió más estrechamente al rift mismo, y se acentuó el adelgazamiento cortical.

¿Qué puede agregarse?

El Rift africano se reconoce por su gran biodiversidad y porque los hallazgos paleontológicos y arqueológicos lo colocan como la «cuna de la humanidad», ya que los ejemplares más antiguos de homínidos fueron encontrados en ese entorno.

Por otra parte, las montañas Virunga son el último refugio de los gorilas de montaña.

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Un abrazo y hasta el miércoles. Graciela. P.S.: La imagen que ilustra el post es de este sitio.

¿Por qué se sienten de distinta manera los terremotos en distancias similares?

Empiezo contándoles que ayer hubo un sismo en las cercanías de Los Ángeles (USA), al que no voy sin embargo a referirme específicamente, porque no fue de los más grandes ni generó titulares en los diarios.

No obstante, sí me ha dado un tema de conversación con ustedes, y para introducirlo, les cuento el contexto.

Ayer me llamó el Pulpo, para contarme que estaba escuchando un podcast producido en California, cuando los que lo estaban transmitiendo comentaron que se acababa de sentir un temblor. Al intercambiar impresiones, todos lo habían experimentado de maneras diferentes, pese a estar aproximadamente a la misma distancia del epicentro. Por supuesto, el Pulpo-mi hijo- me «exigió» que explicara eso en el blog, y aquí estamos, poniendo manos a la obra.

¿Cuál es el alcance de este post?

Es muy importante aclarar que NO voy a referirme a los efectos reales de un sismo, sino a la manera en que éste es percibido por las personas en distintos lugares, todos equidistantes del epicentro. Es decir que aquí no hablaré de los lógicos cambios que se relacionan con la mayor o menor distancia a la zona donde se inicia la liberación de energía. Muy por el contrario, podríamos visualizar una circunferencia de un radio X, con centro en el sitio de ruptura, y comparar cómo se siente el mismo movimiento telúrico, a lo largo de esa línea.

La otra aclaración necesaria es que sobre los efectos reales de los sismos sobre los seres vivos, paisajes, bienes y construcciones, ya he subido sendos posts hace bastante tiempo, y a ellos los remito si eso es lo que quieren comprender.

Insisto: hoy hablamos de una forma de percibir el evento, no de sus efectos concretos.

¿Qué factores inciden en la percepción de un terremoto por parte de las personas?

Podríamos reunir las diferencias en las percepciones en cinco grandes grupos:

  1. Las condiciones personales de quienes se encuentran en la zona analizada.
  2. El momento de ocurrencia.
  3. Las condiciones del terreno geológico o litología.
  4. La situación topográfica.
  5. La vulnerabilidad.

¿Cómo inciden las condiciones personales?

Probablemente sea el factor más importante, porque estamos hablando precisamente de percepciones individuales. Así, es importante reconocer que hay personas particularmente sensibles a los movimientos telúricos, como las hay al sonido, a la luz, a los cambios de temperatura o a los aromas. Unos los sienten más atenuados y otros los sienten magnificados.

En general suele decirse que las personas muy estables reaccionan menos a los terremotos que las que tienen alteraciones nerviosas, o afecciones como el vértigo o la inestabilidad motriz.

También tiene importancia la historia previa de cada persona involucrada. Quien haya perdido afectos o bienes en un evento sísmico tendrá una reacción muy diferente a quien no ha experimentado tales pérdidas. A la inversa, quienes viven en zonas donde los sismos son habituales estarán más acostumbrados a ellos que quienes sólo están de paso y los viven por primera vez. En este último caso, las respuestas tenderán a ser más emocionales.

¿Cómo incide el factor temporal?

El horario de ocurrencia tiene que ver con la percepción resultante. En los horarios nocturnos o de descanso, quienes están en reposo lo sienten normalmente con mayor intensidad, precisamente porque tienen una referencia más estática (su propio cuerpo). Sin embargo puede también ocurrir exactamente lo opuesto, cuando se trata de personas en sueño muy profundo que pueden no llegar ni a enterarse del movimiento.

¿Cómo inciden las características del terreno?

Las ondas sísmicas se desplazan de diversas maneras y con velocidades diferentes según las características de los materiales que atraviesan.

De resultas de ello, los terremotos se perciben de manera distinta según el sitio de que se trate. En general, en los terrenos de roca firme y compacta, los efectos se moderan, entre otras cosas, porque las ondas pasan muy rápidamente dejando poco tiempo para sentir sus efectos.

En los suelos desagregados, los efectos pueden durar algunos segundos más, los que llegan a percibirse como una eternidad para los afectados.

Existen además efectos reales que las personas notan aunque ignoren de qué se trata, y es obvio que su sensación de incomodidad y angustia sea proporcional a esos efectos.

En terrenos arcillosos, puede haber una cierta licuefacción, que lleva al suelo a pasar a un estado casi fluido, con desplazamientos, inestabilidad, asentamientos diferenciales, etc. Todo esto hace que las personas tengan reacciones distintas.

Por otra parte los espacios muy modificados por el hombre llegan a tener comportamientos muy complejos y a veces hasta impredecibles, lo que hace que la población se vea sometida a otros estímulos y se diversifiquen las reacciones.

¿Cómo incide la topografía?

Las formas topográficas exhiben una gran variabilidad, de modo que es muy difícil resumir su posible influencia, pero podría generalizarse que a mayores alturas la distancia al hipocentro aumenta, de modo que las ondas recorren más espacio antes de alcanzar la superficie, y en el camino disipan algo de su energía. Es por eso que en las zonas bajas las personas tienden a sentirse más afectadas.

En casos particulares, como en las costas, donde pueden ocurrir tsunamis, la alarma naturalmente se incrementa con el riesgo.

¿Cómo incide la vulnerabilidad?

En un lejano post les he explicado lo que es el riesgo geológico, y allí he definido la vulnerabilidad. Les recomiendo ir a leer ese texto,pero les recuerdo que se relaciona con la fragilidad inducida por las construcciones, infraestructura, densidad poblacional, etc.

En este caso, es obvio que la gente se sentirá más asustada si hay pánico general inducido por la precariedad de las construcciones que comienzan a sacudirse y/o desplomarse. Y esa sensación crece con la cantidad de personas que pierden el control.

¿Qué más podemos agregar?

Nada de todo lo analizado puede considerarse de manera aislada, ya que la percepción del sismo se ve modificada por el complejo sistema que, al menos temporariamente, constituyen todos los elementos involucrados que se modifican entre sí.

Por último, les recuerdo que también pueden encontrar en el blog varios posts con recomendaciones para la eventualidad de un evento sísmico.

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Un abrazo y hasta el miércoles. Graciela.

Una foto muy especial

No les traigo la foto sino el link para que la busquen en su sitio original, porque me parece más justo, pero no dejen de verla, si es que todavía la encuentran porque tiene un par de meses

Disfrútenla y vuelvan el lunes para un post de los míos. Buen fin de semana. Graciela.

El Departamento de Tarija en Bolivia

Hoy les traigo alguna información sobre otro de esos lugares que considero interesantes para los geólogos y turistas en general, y que he tenido la fortuna de conocer hace algunos años. Se trata del Departamento de Tarija en cuya ciudad principal y homónima he probado las comidas más ricas en muchos años. Recuerdo la belleza de los paisajes, la amabilidad de su gente y su excelente gastronomía con muchísimo cariño. Y ojo que ni siquiera incursioné en sus platos típicos, sino que me maravillé ante la perfección de los platos que podría comer en mi propia casa, sólo que los preparan con tal dedicación y maestría que fueron como un redescubrimiento de lo cotidiano.

¿Dónde queda el departamento de Tarija?

El Departamento de Tarija se encuentra en la porción sur de Bolivia, limitando al sur y suroeste con Argentina; al este con Paraguay, y al oeste y norte con los departamentos bolivianos de Potosí y Chuquisaca respectivamente. Está alojado en la región conocida como El Gran Chaco, que puede definirse como una altiplanicie localizada entre los Andes y el Amazonas, caracterizada por un clima semitropical de altura.

¿Qué origen tiene su nombre?

Cuando comencé a investigar sobre este punto, me encontré con una información muy interesante, ya que hay una gran controversia al respecto, en la que se mencionan diversas posibilidades que eventualmente se relacionan entre sí.

En realidad no está claro si el departamento toma el nombre de su ciudad capital, o si ésta toma su nombre del valle que la incluye. Esta última posibilidad parece más creíble ya que en antiguos documentos la ciudad comienza por llamarse «Villa de San Bernardo de la Frontera de Tarija», más tarde aparece como San Bernardo de Tarija y finalmente como Tarija a secas.

Pero la palabra misma genera también algún grado de discusión, ya que es bastante común asumir que la raíz de la palabra Tarija, viene del nombre árabe Tariq o Tarik, correspondiente a un general musulmán (Táriq ibn Ziyad) que en el año 711 cruzó hacia la península ibérica por el estrecho del monte o peñón al que bautizó como Jabal Tariq, es decir la montaña de Tariq, nombre que derivaría luego en Gibraltar.

La propia palabra Táriq, evolucionó luego a Tarij, Torija y finalmente Tarija.

Pero cómo llegaría este nombre a Bolivia es también muy discutido, ya que los historiadores eligen una de al menos tres posibles vertientes.

  • La vertiente patronímica tradicional que alude a un supuesto conquistador español llamado Francisco de Tarifa o Tarija, separado de la expedición de Diego Almagro a Chile. Salvo tradiciones orales, no hay documento oficial alguno en que se mencione a este personaje, pero la falta de pruebas no es prueba tampoco, si se considera la precariedad de las crónicas de la época.
  • La vertiente toponímica, según la cual tres miembros de la avanzada de Diego de Almagro, llamados Juan de Sedizo o Sedizio, Antonio Gutiérrez y Diego Pérez del Río habrían llegado a Tarija, alrededor del mes de agosto de 1535, y la habrían denominado así en recuerdo y homenaje al monte Torija del que ya hablamos más arriba. Tampoco hay demostración fehaciente de la existencia real de esos soldados.
  • La vertiente autóctona y probablemente la más creíble, aunque no aclare el significado de la palabra misma es la siguiente: la denominación valle de Tarija aparece por primera vez (aunque escrito como balle -así, con be labiel- de Tarija) en un documento oficial, aludiendo a un nombre preexistente e informado a Francisco de Pizarro por Manco Inca, a pedido del primero, que intentaba dejar por escrito la composición territorial de las áreas que gobernaba.

¿Cómo puede describirse de manera general?

El departamento de Tarija en su totalidad cubre una superficie de unos 37.623 km2, implicando con ello alrededor del 3,4% del total del territorio boliviano. Su rasgo dominante es la presencia de la Alta Cuenca del Río Bermejo que ocupa casi la tercera parte del departamento con un área de 12.180 km2.

Sus principales productos agrícolas son: maíz, trigo, papa, vid y hortalizas, constituyendo un circuito turístico de bodegas tradicionales. En cuanto a la ganadería se explota ganado vacuno, ovino, porcino y caprino.

¿Por qué es interesante para la Geología?

En las últimas décadas el creciente conocimiento del marco estratigráfico, obtenido sobre la base de análisis paleontológicos, geología de campo e interpretación de información sísmica y de pozos en la Cuenca de Tarija, ha despertado un interés centrado en su potencial como portador de hidrocarburos en los conjuntos de secuencias de edad silúrica y devónica.

Por otra parte, la cuenca ha preservado una rica fauna de mamíferos que se descubrió hacia comienzos del Siglo XIX. Adicionalmente, hay dataciones de radiocarbono que proveen una cronología para el Plestoceno tardío que se utiliza como proxy de cambios climáticos de las últimas decenas de miles de años.

¿Cuál es el contexto geológico?

La Cuenca de Tarija contiene espesores que superan los 10 km de rocas sedimentarias a partir del Silúrico, repartidos en varios ciclos sedimentarios con diferentes mecanismos de subsidencia e historias deposicionales.

Se trata de ciclos que sobreyacen en discordancia a rocas de edad Cambro-Ordovícico consideradas como basamento.

El Ciclo Siluro-Devónico incluye más de 3.000 m de sedimentos clásticos de origen marino en que alternan facies arenosas y arcillosas. Estas últimas, de colores negro y gris oscuro tienen potencial como roca madre de hidrocarburos, o bien alernativamente como sellos de trampas regionales en que las facies de areniscas son los reservorios, alojando la mayor cantidad de reservas de gas de esta cuenca.
El Ciclo Carbónico-Pérmico yace en discordancia erosiva sobre el ciclo anterior e incluye más de 1.500 m de espesor de facies clásticas continentales con indicios de eventos glaciales que habrían afectado al Supercontinente de Gondwana durante el Carbónico. Las facies glaciales y periglaciales están formadas por areniscas de canales y rellenos de valles, y limoarcilitas rojas y diamictitas, con la porción superior del depósito indicando condiciones climáticas más cálidas y con influencia marina.

El Ciclo Mesozoico está compuesto por aproximadamente 1.000 m de facies clásticas continentales, dominantemente eólicas, de edad jurásica. Estos depósitos arenosos constituyen interesantes reservorios.

El Cretácico Superior está señalado por eventos transgresivos que alcanzaron el sector norte de la cuenca de Tarija y depositaron unos 300 m de sedimentos clásticos calcáreos.

El Ciclo Terciario está vinculado con el levantamiento tectónico de la Cordillera de los Andes, con materiales clásticos continentales que superan los 5.000 m de espesor, con secuencia típicamente grano y estratocreciente, característica de depósitos sinorogénicos.

Este ciclo de deformación acontecido en el Terciario no afectó el sector oriental de la Cuenca, conocido como Llanura Chaqueña.

Ya el Cuaternario implica los sedimentos más recientes, donde se han desarrollado los suelos agrícolas con las producciones que mencionaba más arriba.

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Un abrazo y hasta el miércoles. Graciela. P.S.: La imagen que ilustra el post es de este sitio.

Con motivo del Día de la Conservación del Suelo

Cada 7 de julio se conmemora el Día Mundial de la Conservación del Suelo, en homenaje al conservacionista estadounidense Hugh Hammond Bennet, que falleció en esa fecha en 1960. Como un reconocimiento a sus esfuerzos en la protección del suelo, fue instituida la fecha, en 1963.

Su trabajo se desarrolló en una época en que no existía conciencia alguna de la fragilidad del recurso suelo, es decir en la década del 30, cuando la falsa creencia de que se trataba de un bien inagotable, condujo a una explotación tan inadecuada que en todo el mundo se perdieron millones de hectáreas de suelos fértiles, que se transformaron en desiertos, o cuya productividad se redujo de manera extrema.

Es por eso que puede considerarse a H.H. Bennet como un verdadero pionero en el tema.

En adhesión a la fecha, les dejo algunos links a posts que les pueden interesar dentro de este mismo blog.

Por supuesto, hay muchísimos otros posts sobre los suelos, a los que pueden acceder siguiendo los links en cada uno de los arriba mencionados; buscando los posts relacionados que aparecen al pie de ellos, o directamente usando el tag Suelos en la side bar.

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Un abrazo y hasta el miércoles. Graciela.

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