Otra anécdota desopilante.
Esta anécdota les va a parecer increíble, pero es absolutamente real, y cuando ocurrió, me dejó a mí misma de una pieza.
Por supuesto, aunque lo rcuerdo perfectamente, me reservo el nombre de la ex alumna involucrada, por aquello de que se puede decir el pecado, pero no el pecador.
Esto ocurrió hace más de veinte años, en un examen parcial final y escrito, por el mes de noviembre.
Era una tarde de muchísimo calor y yo estaba tomando ese examen en el aula que por ese entonces llamábamos cariñosamente «la cueva», por su ubicación en el edificio, y porque estaba siempre lleno de tierra, fragmentos de minerales, astillas de rocas, etc., etc, precisamente por la actividad que allí desarrollábamos.
Entre los alumnos, había una chica de aspecto algo «hippie» como decíamos en la década del 70, muy inteligente, pero muy particular también.
En un momento dado, (hablo de hace más de 20 años atrás), debido a la canícula, se quitó las sandalias y continuó escribiendo «en patas». Y así, «pata pila», se levantó y llegó a mi escritorio a hacerme una pregunta.
Cuando llegó a mi lado, se dio cuenta y me dijo:
-Ay, disculpe, profe que esté sin las sandalias, ¡pero es que hace tanto calor!
A lo que yo le respondí:
-A mí no molesta, si a vos no te molesta ensuciarte los pies, porque el piso es una mugre…
-Bah, ¡si viera la mugre que hay en mi casa!- me contestó ella, y todavía no me repongo de la impresión.
La foto que ilustra el post es de este sitio.
This anecdote is going to seem incredible, but it is absolutely real. I liked this kind of humor.
Yes, Fastcustom, it is absolutely real.